El Gobierno oficializó los cambios en el impuesto a las Ganancias con la publicación del Decreto 652/2024, que introduce modificaciones significativas que afectarán a más empleados en relación de dependencia. La recaudación adicional prevista por este ajuste es clave para mantener el superávit fiscal en lo que queda del año, aportando aproximadamente el 0,4% del PBI.
> [#AFIP] El gobierno reglamentó el impuesto a las ganancias, se pagará a partir de este mes #N8 pic.twitter.com/jK9jz4TD2E— Canal de la Ciudad (@CanalCiudadBA) July 22, 2024
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La reforma establece un nuevo mínimo no imponible de $1.800.000 brutos para solteros y $2.200.000 para casados con hijos. Este ajuste significa que alrededor de 800.000 trabajadores que habían sido eximidos durante la gestión de Alberto Fernández volverán a pagar el tributo, con alícuotas que varían del 5% al 35%.
Una de las principales preocupaciones es la retroactividad de la medida, efectiva desde el 1 de enero. Según la reglamentación, ningún empleado deberá pagar retroactivamente por ingresos percibidos antes de la implementación de la reforma en julio. La ley contempla un incremento del mínimo no imponible para neutralizar cualquier deuda potencial.
El sector petrolero, particularmente en la Patagonia, ha expresado inquietud ante estos cambios. La Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles advirtió sobre posibles medidas de fuerza, mientras que los gobernadores de las provincias patagónicas han señalado que el costo de vida más alto en la región no fue adecuadamente considerado en la reforma.
La actualización del mínimo no imponible se hará trimestralmente durante este año y semestralmente a partir del próximo, basándose en el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
