Chile restituyó el reconocimiento de la Patagonia argentina como zona libre de fiebre aftosa sin vacunación y anunció la reapertura del mercado para las exportaciones de carne ovina y mercancías bovinas provenientes del sur del país. La medida, comunicada por el Servicio Agrícola Ganadero (SAG), pone fin a la suspensión impuesta meses atrás y restablece un flujo comercial clave para la región.
El levantamiento de las restricciones se concretó tras una serie de negociaciones entre el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía. Las autoridades chilenas tomaron la decisión luego de recibir un informe favorable del SAG, basado en la auditoría realizada a la barrera zoofitosanitaria de la Patagonia.
El reconocimiento sanitario había sido suspendido luego de que Argentina modificara su normativa interna para permitir el ingreso de carne con hueso al sur del río Colorado, medida que Chile consideró inicialmente riesgosa para la protección de su frontera ganadera.
Con la restitución del estatus sanitario, se normalizan las exportaciones de carne ovina patagónica, que representan alrededor de 30 millones de dólares anuales. También se reactivan las ventas de mercancías bovinas, principalmente toros, que habían quedado interrumpidas por la medida preventiva.
Según el comunicado oficial, la planificación de las negociaciones permitió reducir al mínimo el impacto sobre el comercio bilateral, ya que la temporada de exportaciones ovinas se concentra en los primeros meses del año.
La resolución chilena será publicada oficialmente en el Diario Oficial de ese país y entrará en vigencia de inmediato.
Actualmente, Argentina cuenta con cuatro zonas libres de fiebre aftosa: tres sin vacunación (la Patagonia unificada, Patagonia Norte A y los Valles de Calingasta) y una con vacunación, que abarca el centro y norte del país. Todas ellas están reconocidas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y se ratifican anualmente.
Con esta decisión, la Patagonia recupera su plena capacidad exportadora y refuerza su posición como una de las regiones sanitariamente más seguras del mundo en materia ganadera.