La política pesquera de Chubut atraviesa días de máxima tensión. Una denuncia por presunto pedido de sobornos que involucra al fiscal de Estado, Andrés Meiszner, la polémica por la creación de nuevos permisos de pesca y la amenaza de un paro total del sector pesquero mantienen a la provincia en un clima convulsionado.
Todo comenzó tras la publicación de una denuncia judicial presentada en California por la empresa Red Chamber, que acusa a funcionarios provinciales de haber solicitado coimas para continuar operando la ex planta Alpesca.
Según el documento, Meiszner habría pedido un pago de 6,5 millones de dólares para permitirle a la firma seguir administrando los activos expropiados. El funcionario negó de manera categórica la acusación y anticipó que iniciará acciones legales por daños personales e institucionales.
La controversia estalló en medio de un intento del Gobierno provincial por avanzar con un proyecto de ley que buscaba crear dos nuevos permisos de pesca. El texto, firmado por el gobernador Ignacio Torres y el secretario de Pesca, Andrés Arbeletche, planteaba ampliar temporalmente la cantidad de permisos para la flota amarilla durante la temporada 2025/2026. Sin embargo, la propuesta generó un fuerte rechazo de las cámaras empresarias del sector, que alertaron sobre el riesgo para la sustentabilidad de los recursos y la transparencia institucional.
La Cámara Patagónica de Industrias Pesqueras, la Cámara de Flota Amarilla, la Cámara del Golfo San Jorge, la Asociación de Pescadores Artesanales y la empresa Conarpesa reclamaron suspender el tratamiento legislativo del proyecto.
A esa posición se sumaron los gremios STIA, Centro de Patrones, Asociación de Capitanes y SICONARA, que advirtieron que de aprobarse la iniciativa iniciarían un paro total e indefinido.
En medio del creciente conflicto, fuentes cercanas al Ejecutivo indicaron que el gobernador Ignacio Torres evaluaría este lunes retirar el proyecto de ley para descomprimir la situación. El posible retroceso marcaría el cierre de una semana marcada por acusaciones cruzadas, protestas inminentes y un nuevo capítulo en la compleja trama pesquera de Chubut.







