La noche del 1 de abril de 2024, Juan Caliani, de 34 años, escuchó ruidos en el patio de su casa, en la esquina de Luis Beltrán y Cacique Purrán. Cuando salió para ver qué ocurría, se encontró con dos jóvenes que habían entrado con intención de robar. Durante el forcejeo, uno de ellos lo atacó con un arma blanca y Caliani recibió varias puñaladas que le provocaron la muerte en el lugar. Sus padres, que estaban dentro de la vivienda, quedaron en estado de shock.
El crimen conmocionó a Neuquén, especialmente al ámbito periodístico: Caliani era productor en AM Cumbre 1400 y relator deportivo. También dejó una fuerte huella en la Universidad Nacional del Comahue, donde había sido consejero estudiantil.
Las primeras 48 horas resultaron claves. La fiscalía identificó rápidamente a los presuntos autores: dos adolescentes, imputados por homicidio en ocasión de robo y puestos bajo resguardo del sistema penal juvenil.
Un mes después, en mayo de 2024, se avanzó hacia un juicio abreviado. Los jóvenes admitieron su participación y quedaron bajo un régimen de arresto domiciliario, tratamiento psicológico obligatorio y controles periódicos vinculados al consumo problemático.
La etapa que comienza ahora no busca determinar culpabilidades (ya admitidas en el juicio abreviado) sino establecer la pena que corresponde aplicar, en función de la evolución de los imputados durante el último año y medio.
Un juez especializado en justicia juvenil evaluará:
- informes psicológicos,
- avances o retrocesos en los tratamientos,
- reportes de supervisión,
- testimonios de la familia de Caliani,
- y declaraciones de los propios jóvenes.
Las posibilidades abarcan desde una pena efectiva en un centro penal juvenil, una reducción de condena si se considera que el hecho no se configuró plenamente como homicidio en ocasión de robo, o incluso la extinción de la pena si se acredita un proceso de reinserción plenamente satisfactorio.
La convocatoria de la familia
Días antes del inicio de las audiencias, la familia de Juan Caliani llamó a la comunidad a acompañarlos este miércoles a las 8.30 en Ciudad Judicial. Para ellos, esta etapa representa “la búsqueda de una justicia plena”: un paso necesario para cerrar el duelo y remarcar el valor simbólico del caso en un contexto de creciente preocupación por la inseguridad.
El padre de la víctima, Jorge Caliani, aseguró que no vio arrepentimiento en los acusados y expresó su expectativa de una pena que refleje la gravedad del hecho.
El juicio por el crimen de Caliani involucra un profundo componente emocional y social. Reactiva el debate sobre el sistema penal juvenil, los procesos de reinserción, las responsabilidades del Estado frente a la violencia y la memoria de un joven recordado por su compromiso tanto en el periodismo como en la vida universitaria.
Las audiencias se extenderán hasta mediados de diciembre. Para su familia, amigos, colegas y la comunidad universitaria, será una instancia decisiva: la oportunidad de obtener una respuesta judicial que consideran fundamental para cerrar una herida aún abierta.
Fuente: Medios

