La inminente jura de Lorena Villaverde como senadora nacional por Río Negro dejó de ser un simple trámite político. Una denuncia judicial por presunto financiamiento irregular de su campaña electoral encendió las alarmas en La Libertad Avanza y volvió a exponer las tensiones internas que atraviesan al espacio libertario en la provincia.
La presentación fue realizada por Daniel Sarwer, presidente de la ONG ARM Global, ante el Juzgado Federal Nº 5 de Comodoro Py. El pedido busca investigar el origen de los fondos utilizados durante la campaña y solicita suspender la asunción de Villaverde hasta que se verifique la trazabilidad del dinero.
En el expediente aparecen mencionados Fred Machado, extraditado recientemente a Estados Unidos, y Claudio Cicarelli, pareja de Villaverde y presunto operador en movimientos financieros ligados a la explotación minera en Río Negro.
Aunque no hay imputaciones formales, la denuncia sacudió el tablero político libertario. El caso se suma a una disputa interna por una factura de 70 millones de pesos que el responsable financiero de la alianza, Roberto Zgaib, se negó a aprobar por inconsistencias en la documentación. La maniobra, que involucraba a un funcionario de ANSES vinculado al espacio, generó un conflicto que aún no se resuelve.
Con acusaciones cruzadas, sospechas de manejos poco claros y un frente judicial en marcha, el desembarco de Villaverde en el Senado quedó envuelto en incertidumbre.
Si la Justicia decide avanzar antes del 10 de diciembre, la jura podría postergarse y su banca sería ocupada por el siguiente en la lista, Enzo Fullone.
El escenario tensiona a La Libertad Avanza en Río Negro, que ya venía fragmentada desde el cierre de listas. Las diferencias sobre el manejo de fondos, la relación con referentes nacionales y los vínculos con figuras investigadas por corrupción vuelven a poner en jaque la cohesión del espacio, justo cuando busca consolidarse como alternativa de poder de cara al 2027.







