Un incendio forestal de magnitud avanza en una estancia ubicada en las inmediaciones de Junín de los Andes, donde se estima que alrededor de 20 hectáreas de vegetación autóctona ya fueron consumidas por el fuego. El foco permanece activo y genera preocupación por su proximidad a una vivienda rural, lo que llevó a reforzar el operativo y a priorizar la protección de personas y bienes.
El incendio se desarrolla en el sector de la estancia Chacayal y presenta un comportamiento dinámico, favorecido por condiciones meteorológicas adversas. Ante este escenario, el Servicio Provincial de Manejo del Fuego (SPMF) dispuso un importante despliegue de recursos, incluyendo el envío de refuerzos aéreos: tres aviones hidrantes y un helicóptero, que realizan descargas de agua de manera constante sobre los sectores más comprometidos.
En tierra, las tareas están a cargo de la Brigada de Junín del SPMF, con el apoyo de la Brigada del Parque Nacional Lanín y de los Bomberos Voluntarios de Junín de los Andes. Los equipos trabajan en el ataque directo al fuego, el enfriamiento de puntos calientes y la construcción de líneas de defensa para evitar que las llamas se expandan hacia zonas habitadas o de alto valor ambiental.
Según indicaron fuentes, el foco más activo se encuentra relativamente cerca de una vivienda, lo que elevó el nivel de alerta del operativo. Si bien hasta el momento no se ordenaron evacuaciones, no se descarta la adopción de medidas preventivas si la situación lo requiere.
Las autoridades advirtieron que las fuertes ráfagas de viento y la baja humedad relativa complican las tareas de control y favorecen la rápida propagación del fuego. Por este motivo, se mantiene un monitoreo permanente del comportamiento del incendio, ya que los cambios en la dirección del viento pueden modificar el frente de avance en pocos minutos.
Asimismo, se solicitó a la población evitar circular o acercarse a la zona afectada para no entorpecer el trabajo de los equipos de emergencia y reducir riesgos. Ante la detección de humo o situaciones sospechosas, se pidió dar aviso inmediato a los números habilitados: 100 (Bomberos) o a las líneas del Servicio Provincial de Manejo del Fuego.
Este incendio se suma a otros focos registrados en las últimas semanas en la región, en un contexto marcado por la sequía prolongada y las tormentas eléctricas, factores que incrementan el riesgo de nuevos inicios de fuego. Mientras tanto, las brigadas continúan trabajando intensamente para contener el avance de las llamas y minimizar el impacto ambiental.
Fuente: Medios

