Un general ruso murió este lunes por la mañana tras la explosión de un artefacto colocado debajo de su automóvil en Moscú. El hecho ocurrió en la calle Yasenevaya y dio inicio a una investigación por parte de las autoridades rusas.
La víctima fue identificada como el teniente general Fanil Sarvarov, jefe de la Dirección de Entrenamiento Operacional del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, quien falleció a causa de las heridas provocadas por la detonación, según confirmó el Comité de Investigación. Su portavoz, Svetlana Petrenko, indicó que los investigadores analizan distintas hipótesis, entre ellas la posible implicación de los servicios de inteligencia de Ucrania.

Desde el Kremlin informaron que el presidente Vladímir Putin fue notificado de inmediato sobre el asesinato. En tanto, el Ministerio de Defensa señaló que Sarvarov había participado previamente en operaciones militares en Chechenia y en la campaña rusa en Siria.
El ataque se produce en un contexto de antecedentes recientes. En diciembre de 2024, el teniente general Igor Kirillov, jefe de las fuerzas de protección nuclear, biológica y química, murió por la explosión de una bomba oculta en una patineta eléctrica frente a su residencia en Moscú. En ese caso, el servicio de seguridad de Ucrania se adjudicó el atentado. Meses después, en abril, otro alto mando militar, Yaroslav Moskalik, fue asesinado mediante un artefacto explosivo colocado en su vehículo.
Las autoridades rusas vinculan estos hechos con el conflicto con Ucrania y mantienen abiertas las investigaciones para determinar responsabilidades.
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