Un hombre de Plottier comenzó a ser juzgado esta semana por una serie de abusos contra una niña. La fiscalía lo imputó por los delitos de abuso sexual simple y abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa.
Según la acusación, los incidentes ocurrieron entre 2015 y 2020, cuando la menor estaba bajo el cuidado del acusado. En su declaración de apertura este miércoles, la fiscal Valeria Panozzo anticipó que durante el juicio se presentarán testigos para respaldar la teoría de la fiscalía.
Panozzo expresó que el objetivo es que el acusado sea declarado responsable penalmente por abuso sexual simple continuado, agravado por la convivencia y la guarda con una menor de 18 años, junto con el delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por la convivencia y la guarda, en grado de tentativa y como autor (artículos 119, primer, tercer y cuarto párrafo, incisos b y f y 45 del Código Penal).
La defensora de los Derechos de Niñez y Adolescencia, Silvia Acevedo, representa a la víctima como querellante institucional. El tribunal que preside las audiencias está compuesto por las juezas Carina Álvarez, Florencia Martini y el juez Luis Giorgetti.
Padre acusado por abuso
En otra instancia, otro hombre fue imputado ayer por supuestos abusos reiterados contra su hija en un domicilio de Senillosa. En una audiencia de formulación de cargos en la Ciudad Judicial, la fiscal Eugenia Titanti describió los hechos y la imputación contra el acusado.
La fiscal, especializada en Violencia contra las Mujeres, Diversidades y Delitos Sexuales, solicitó una restricción de acercamiento a menos de 200 metros de la víctima y prohibición de contacto por cualquier medio durante seis meses.
Los delitos atribuidos al acusado son abuso sexual simple continuado y abuso sexual con acceso carnal continuado, agravados por el vínculo, la guarda y la convivencia con una menor de 18 años, en concurso real y como autor (artículos 119 primer, tercer y cuarto párrafos, incisos “a”, “b” y “f”, 45 y 55 del Código Penal).
Según la fiscal, los abusos ocurrieron repetidamente desde 2012 hasta 2018 en una vivienda de Senillosa, aprovechando momentos de soledad.
El juez de garantías Juan Guaita, a cargo de la audiencia, aceptó los cargos y las medidas solicitadas por la fiscalía, incluyendo la prohibición de acercamiento y contacto por seis meses. Finalmente, Guaita fijó un plazo de cuatro meses para que la fiscalía concluya la investigación.
Fuente: Medios
