El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, admitió públicamente que mantuvo un encuentro con el empresario Fred Machado, acusado en Estados Unidos de vínculos con el narcotráfico, aunque aseguró que fue “hace ocho o diez años” y que se trató de una reunión breve y protocolar vinculada a una visita del club Deportivo Viedma.
Según explicó, Machado llegó “acompañando” a dirigentes del club para gestionar aportes destinados a contratar jugadores extranjeros y, en ese marco, dijo tener “intenciones de invertir en la provincia”. Weretilneck remarcó que el contacto “no duró más de media hora” y que fue “la única vez” que lo vio. Negó de forma tajante que Machado haya financiado la campaña de Juntos Somos Río Negro, en respuesta a los señalamientos del exministro kirchnerista Martín Soria.
Días atrás, el propio Machado había declarado que conocía a varias figuras políticas nacionales, entre ellas José Luis Espert, Facundo Manes, Juan Manzur, Horacio Massaccesi y al mandatario rionegrino. Weretilneck es, hasta ahora, el único que ofreció una explicación pública sobre ese vínculo.
Sobre si en aquel encuentro participó Claudio Ciccarelli, primo de Machado y vinculado al Deportivo Viedma, el gobernador dijo no recordarlo con precisión y deslizó que “habría que preguntarle a los que estaban”. Confirmó, sin embargo, que Ciccarelli trabajó en la Secretaría de Deportes desde 2003 y que, a pedido de los dirigentes del club, dejó sus tareas en el Estado para dedicarse de lleno a la institución.
Weretilneck también se refirió a la actividad empresarial de Ciccarelli en la explotación de canteras de arena para la industria petrolera y detalló que actualmente tiene permisos sobre tres y otras dos en trámite.
Como respuesta política a las acusaciones de Soria, el gobernador mostró a los medios dos fotografías donde vinculó al candidato de Fuerza Patria con integrantes de la familia Montecino, señalada como parte de una organización narco en Cipolletti. “Se habló mucho de la política y el narcotráfico. Esta es la verdadera vinculación, dijo mostrando las imágenes, la relación de la familia Soria con los Montecino, una banda narco con innumerables asesinatos”.
La polémica abre un nuevo capítulo en la tensión política en Río Negro, donde el eje narco y los vínculos con estructuras del poder volvieron a quedar en el centro del debate. Luego llegó la respuesta del peronismo.
El legislador José Luis Berros dijo que el gobernador “está desesperado. Por eso muestra una foto vieja de campaña para manchar al peronismo y ni siquiera se da cuenta que en la misma foto hay funcionarios actuales de su propio Gobierno”.
“Sr. Gobernador ocúpese del desastre de los hospitales, la salud y la educación en Río Negro, y hágase cargo del desastre de la Ley Bases y de todas las leyes que votaron en contra de los rionegrinos y a favor de Milei”, sostuvo Berros.